Renacimiento Italiano.Contexto

El Renacimiento Italiano abarcó desde finales del S. XIV hasta el S. XVII  y supuso un desarrollo cultural e ideológico más que económico o social produciendo cambios sobre todo en el arte y en la literatura visibles entre la clase alta, siendo ésta la más beneficiada de dichos cambios ya que para la mayoría de la población pobre y trabajadora,  el renacimiento no afectó con respecto al período anterior, la Edad Media.

Para las clases altas de la época significó una curiosidad por la antigua cultura clásica, tanto en el aspecto artístico como en el pensamiento o en la literatura introduciendo a la cultura de este siglo un mayor intelectualismo.

El enorme desarrollo artístico de este nuevo resurgir fue mérito en gran parte del mecenazgo que en en el S.XV impulsó la creación de gran número de obras artísticas gracias a su apoyo o patrocinio a los artistas,que comenzó a surgir a partir del mecenazgo de los Medici que estuvieron gobernando durante los próximos tres siglos. Fue tal la evolución, que el renacimiento supuso un antes y un después en el panorama cultural llegando a extenderse por toda Europa.

Las novedades que se fueron introduciendo en el ámbito artístico fueron tan grandes que en el caso de la pintura,  son muy notables las diferencias con respecto a la pintura medieval, dejando atrás las figuras planas y sin movimiento.

En los primeros años, el gran descubrimiento en las técnicas de la pintura, podemos verlo en la introducción de la perspectiva en obras como «La Trinidad» de Masaccio, lo que otorgó a la pintura mayor profundidad y realismo a la hora de reflejar los objetos o personajes en distintos planos. En cambio, durante la Edad Media, solamente se dibujaban las figuras más lejanas en menor tamaño y con los colores más degradados, pero la sensación de profundidad no existía.

otro de los aspectos novedosos fue el uso de la luz y la sombra dando mayor contraste, como podemos observar en las obras de Tziano, lo que serán los inicios de la futura pintura barroca llena de contraste.

Tras este renacimiento temprano, la evolución y las innovaciones fueron a más gracias sobre todo a Leonardo Da Vinci y sus descubrimientos que lo llevaron a crear la técnica del sfumato, ayudando a integrar más a las figuras con el espacio dando mayor profundidad sin que la figura parezca un recortable dentro del cuadro. Esta técnica consistió básicamente en difuminar los bordes de la figura con el el fondo oscuro de modo que no queda tan marcada fusionándose de forma natural con la atmósfera de la pintura.

Por primera vez, comienzan a retratarse temas mitológicos y no solamente religiosos, como fue el caso de Botticelli.

Todos estos adelantos condujeron el arte al manierismo, haciendo las figuras enlongadas en espacios ilógicos con fuertes emociones.